El técnico del Manchester City, Pep Guardiola, parece cansado de las constantes acusaciones de que su club ha infringido las reglas del "juego limpio" financiero, con los traspasos de este mercado. El español ha desafiado las voces críticas pidiéndoles que argumenten con pruebas, cómo los "ciudadanos" están rompiendo las reglas establecidas por la UEFA. Estas acusaciones siempre han seguido a los "ciudadanos", pero se sumaron aún más tras el acercamiento de Jack Grealish en el club, por un monto récord de 100 millones de libras. Pep declaró sobre la situación:
"Tenemos nuestros límites debido al FFP (Reglamento de Juego Limpio Financiero de la UEFA). Estamos en la misma línea que todos los demás clubes. Los clubes deciden por sí mismos qué quieren hacer con su dinero. Cada temporada hemos superado con éxito los controles que están vigentes para todos los equipos. Si estamos haciendo algo mal, ¡inténtelo! "
Guardiola confía en que las críticas al gasto de su club han sido alimentadas por propietarios de clubes rivales que no están dispuestos a invertir al mismo nivel para su equipo. El español agregó:
"Lo he dicho antes, hay dueños que iduan todos los beneficios para ellos mismos. Nuestros propietarios no quieren perder dinero, pero no tienen problemas para gastar. En el pasado, el Manchester United ganó muchos títulos porque gastaba más dinero que otros clubes. ¿Te acuerdas?
Antes había 1 o 2 clubes, ahora hay otros que quieren ser parte del juego. ¿Dónde está el problema? "
Guardiola también se ha opuesto a la idea de que los grandes gastos de ciertos clubes socavan la competencia y la competencia leal entre equipos. El español usó el ejemplo de Barcelona que él mismo dirigió. Según él, los culés alcanzaron las cimas del éxito europeo con jugadores de cantera, es decir, a coste cero. El banquillo número 1 de la ciudad defendió así la idea de que cada club tiene su propia filosofía de jugar al fútbol.